El husky siberiano es una raza de perro de origen ruso conocida por su gran parecido con el lobo y por sus antecedentes de carga de trineos en condiciones climáticas extremas. Es uno de los perros más enérgicos que existen, lo que lo convierte en un gran aliado para propietarios que llevan un estilo de vida activo.
La belleza física de estos peludos nunca pasará desapercibida, y es la principal razón de su gran popularidad en todo el mundo. El también llamado “esquimal siberiano”, es un excelente compañero y hará notar su buen carácter se le preste la atención que necesita.
Si planeas adoptar un husky siberiano (puedes encontrar un nombre para él aquí) y deseas conocer todas las características de esta raza, incluidas sus predisposiciones de salud y cuidados, has llegado al lugar correcto. En esta guía cubriremos todos los aspectos que debes tener en cuenta para darle a tu mascota la calidad de vida que se merece.
Índice
Características básicas del husky siberiano
- Tamaño: Los machos pueden medir entre 53 y 60 cm, mientras que la altura de las hembras varía entre 50 y 56 cm.
- Peso: Los machos pesan entre 20 y 28 kg. Las hembras suelen pesar entre 15 y 23 kg.
- Esperanza de vida: 11-16 años.
- Clasificación: perro de trabajo.
¿Cómo es la apariencia del husky siberiano?
Pelaje
Sin duda alguna, el pelaje del husky siberiano es su principal carta de presentación. Este abrigo denso y bien ajustado al cuerpo es la principal razón de que muchas personas lo consideren un perro grande, cuando en realidad es una raza de tamaño mediano.
Aunque su pelaje de doble capa le permite resistir temperaturas bajo cero, lo cierto es su abrigo puede cambiar considerablemente para adaptarse a temperaturas superiores a los 24°C. De hecho, el husky siberiano puede experimentar hasta dos mudas del pelaje que cubre su capa primaria en un mismo año. Por lo general, esto ocurre durante los períodos de invierno y verano.
Además de los colores blanco y negro que seguramente conocerás, el husky siberiano presenta una de las coloraciones más variadas del mundo canino. Algunos de los más predominantes son el blanco puro, el gris, el negro, el sable, el rojo y el arena. En la mayoría de los casos, estos colores pueden estar acompañados de marcas blancas.
Ojos
Los ojos del husky siberiano se alinean simétricamente y tienen forma de almendra. Pueden ser azules, marrones o ambarinos. Sin embargo, existen ejemplares que pueden presentar heterocromía, una alteración de la pigmentación ocular que genera que el animal tenga un ojo de cada color o dos colores distintos en un mismo ojo. En algunos países, se cree erróneamente que esta alteración es sinónimo de pureza de la raza.
Cabeza
La cabeza es de tamaño mediano y de proporción equilibrada con respecto al cuerpo. Su forma es ligeramente redonda en la parte superior y se hace más delgada al llegar a los ojos. La depresión entre la nariz y la frente (stop) está bien definida.
Región facial
Generalmente, sus orejas son medianas, erectas, de forma triangular y de implantación alta. El pelaje en esta zona es predominante. El hocico es medianamente largo, y su punta no es cuadrada ni punteada. Los labios están apretados y poseen buen pigmento. La nariz puede ser negra y marrón, y suele ser de color carne en perros completamente blancos.
Cuello
El cuello del husky está levemente arqueado y su tamaño es mediano. Cuando el perro está parado, se eleva orgullosamente. Cuando está en movimiento, se extiende para llevar con la cabeza hacia adelante con ligereza.
Cuerpo
- La espalda es musculosa, recta y de longitud media.
- El lomo es delgado y está ligeramente levantado.
- El pecho es fuerte pero no se excede en amplitud.
- Las costillas se arquean perfectamente a partir de la espina dorsal y se aplanan a los lados para facilitar la movilidad.
- La grupa (zona comprendida entre los riñones y la cola) se inclina proporcionalmente a la columna vertebral de tal manera que no obstruye el movimiento trasero del perro.
Patas y cola
Los miembros anteriores y posteriores están moderadamente separados y rectos, con una estructura ósea sustanciosa. A pesar de su fortaleza, las extremidades son muy flexibles. Por su parte, las patas son medianas, ovaladas, y bien cubiertas de pelo en las almohadillas y los dedos.
La cola está bien cubierta de pelaje y tiene forma de cepillo debido a que el pelo que la cubre es más largo al principio que al final. Cuando el perro está atento, se eleva sobre la espalda levemente enrollada. Si el perro se encuentra tranquilo, es normal que la cola esté colgada.
Orígenes e historia del Husky
El husky siberiano es una raza originaria de la región de Chukotka, al noroeste de Siberia. Sus primeros pasos se remontan a unos 3,000 años atrás, y su crianza se le atribuye a los Chukchi, una tribu seminómada de la región. La raza se creó con la intención de ayudar a los cazadores esquimales en la carga de trineos, sirviendo de transporte para llevar las presas capturadas.
En medio de las temperaturas bajo cero, el husky siberiano convivió con las familias Chukchi dentro de sus tiendas. Gracias a su denso pelaje, el perro dormía junto a los niños para mantenerlos calientes durante las noches. Por esta razón, el husky desarrolló un temperamento amigable y era admirado por otras tribus por su buen comportamiento dentro del núcleo familiar.
Aunque el origen genético de la raza es incierto, la evidencia revela la posibilidad de un cruce entre razas pertenecientes a las tribus cercanas de Chukotka, además de lobos árticos. De hecho, investigaciones arqueológicas recientes respaldan esta teoría, y aseguran que el cruce con el lobo se realizó con la finalidad de incorporar rasgos que adaptaran a la raza a su entorno frío. Otros expertos estiman que esta raza podría tener al menos 15,000 años de edad, pero no existe un consenso claro dentro de la comunidad científica sobre este hecho.
El husky siberiano ha estado a punto de extinguirse en dos momentos clave de la historia:
- En el siglo XVIII, durante el asalto del Imperio Ruso a la región de Siberia. Producto del enfrentamiento entre los nómadas y rusos, muchos perros nativos fueron asesinados.
- En 1904, cuando los primeros husky fueron importados a Alaska para competir en carreras. La raza se vio amenazada por los cruces indiscriminados con perros locales para conseguir perros con mejores condiciones físicas.
¿Cómo deben ser los cuidados del husky siberiano?
Debido a su pelaje, predisposiciones de salud y condiciones físicas, el husky siberiano posee necesidades especiales de aseo, nutrición y ejercicio. A continuación, te mostramos las mejores prácticas para elevar la calidad de vida de tu mascota:
- Cepilla su pelaje con regularidad (al menos una vez por semana). Los husky siberianos tienen un pelaje de doble capa para resistir las bajas temperaturas. Este pelaje estacional, lo que significa que mudará más pelo cuando lleguen los climas cálidos del verano. Si vives en un lugar donde hace mucho calor, cepilla su pelo una vez al día para controlar el exceso de pelaje en tu casa.
- El husky es un perro bastante limpio que no suele desprender mal olor. Por ello, baña al tuyo solo cuando lo consideres realmente necesario.
- Corta sus uñas cuando sientas que estas están largas de más, aunque si corre mucho en la calle suelen limarse solas.
- Cepilla sus dientes por lo menos dos veces por semana para evitar la acumulación de sarro y baterias.
- Los husky siberianos aman revolcarse en el barro y la tierra, por lo que será importante revisar constantemente su pelaje, ojos, nariz, orejas y patas en busca de cualquier elemento sospechoso.
- Son perros activos que les encanta pasear, jugar y correr. De hecho, necesitan ejercicio para mantener su cuerpo sano. Si llevas un estilo de vida sedentario, el husky no es la raza adecuada para ti.
- Consulta con tu veterinario cuáles son los requisitos de nutrición para tu mascota. Por lo general, estos perros comen de 1 a 2 tazas de alimento especial para perros por lo menos dos veces al día. A pesar de ser un perro de tamaño mediano y con gran energía, es fácil saciar su apetito y no come en exceso.
Adiestramiento de un Husky Siberiano
Si bien el husky siberiano es un perro amigable y tranquilo, puede ser difícil de entrenar si no se le demuestra quién manda en casa. La buena noticia es que su inteligencia le permitirá adaptarse con facilidad al entrenamiento si este comienza en una fase temprana (8 semanas de edad).
El husky requiere saber quién es el líder del hogar, pero comprende con facilidad las reglas básicas si se les explica correctamente lo que no deben hacer. En este sentido, se recomienda emplear un tono ligeramente suave durante el entrenamiento. La línea entre la disciplina y el abuso del perro es muy delgada. Se requiere una mano firme, pero amorosa.
La socialización durante las primeras semanas de vida será crucial para que su máximo potencial salga a flote y pueda compartir de manera adecuada con niños, personas adultas y otras mascotas. Los husky siberianos prosperan cuando se sienten parte de una manada, y esa será tu principal responsabilidad: hacerle saber que forma parte de tu familia, con los derechos y deberes que eso implica.
Problemas de salud comunes del husky siberiano
Como habrás notado, el husky siberiano es una de las razas de perro más fuertes y resistentes que existen. Sus habilidades y gran energía para el trabajo hablan por sí solas. Sin embargo, como todas las demás razas, estos perros tienden a sufrir algunos problemas de salud a lo largo de su vida.
A continuación, echaremos un vistazo a las principales afecciones y patologías que pueden sufrir estos canes. Esta información te permitirá tener una mejor comprensión de tu mascota y planificar adecuadamente los cuidados únicos que necesita.
Problemas generales
- Infecciones: Al igual que todas las razas de perro, el husky es propenso a sufrir diversas infecciones virales y bacterianas, incluida la rabia, el parvo y el distemper o moquillo.
- Obesidad: Pese a ser perros atléticos, los husky siberianos pueden padecer de obesidad. Debes cuidar muy bien su alimentación, ya que esta enfermedad puede desencadenar otros problemas de salud, incluidos los trastornos metabólicos, enfermedades cardíacas, problemas auditivos, etc.
- Parásitos: Las garrapatas, las pulgas, los gusanos y las dirofilariosis, representan un problema común en los perros. En ocasiones, es imposible evitar que el organismo de nuestras mascotas sea invadido por estas entidades, ya que pueden adquirirlas con una simple caminata, al beber agua, o si son mordidos por un insecto infectado.
Predisposiciones genéticas
Epilepsia
La epilepsia es la enfermedad neurológica más frecuente en perros. Los husky siberianos no escapan de sufrirla, y las convulsiones suelen ser de tres tipos:
- Reactiva: Surge a partir de una afección metabólica, como la deficiencia de azúcar en la sangre, o pueden responder a la presencia de toxinas.
- Secundaria: Es causada por tumores cerebrales, traumatismos de la cabeza o accidentes cerebro vasculares (ACV).
- Idiopática: Es la causa más frecuente en perros, y no está relacionada con ninguna alteración de salud, por lo que los perros sanos son propensos a sufrirla.
Las mascotas que son propensas a convulsiones presentan sus primeros episodios de la enfermedad a partir de los primeros 6 meses de edad. La detección temprana puede permitir encontrar el tratamiento más efectivo, y es probable que el perro deba acudir al veterinario recurrentemente para realizarle estudios que permitan controlar los efectos secundarios y la efectividad de los medicamentos.
Enfermedad de Van Willebrand
También conocida como pseudo hemofilia o hemofilia vascular, es un trastorno caracterizado por la prolongación de los tiempos de coagulación de la sangre, lo que elimina la capacidad de las plaquetas de adherirse a las paredes de los vasos afectados. Sus síntomas incluyen el sangrado de las encías, la nariz, hematomas, presencia de sangre en orina y heces, anemia, y sangrado prolongado cuando el perro sufre alguna herida.
Lamentablemente, esta enfermedad no tiene cura, pero es controlable con tratamiento. En algunas ocasiones, la mascota puede requerir una intervención quirúrgica o transfusiones de sangre.
Displasia de cadera
Es una condición degenerativa que consiste en una formación inusual de la articulación de la cadera. A medida que el perro crece, la cadera no se adapta correctamente al fémur, desplazándose levemente y generando luxación. En consecuencia, la articulación se debilita, al igual que los tejidos, y el perro tiende a cojear. La mayoría de las veces, se produce un fuerte dolor que impide que el can se siente, suba escaleras y realice cualquier actividad que implique esfuerzo.
La displasia de cadera puede convertirse en artritis si no se detecta a tiempo. Si notas que tu mascota presenta dificultad para caminar o cojera en las patas traseras, no dudes en acudir de inmediato al veterinario. En casos graves, la cirugía puede ser una buena opción. Se recomienda evitar el sobrepeso en las mascotas para reducir la posibilidad de artritis.
Generalmente, esta enfermedad responde bien a los tratamientos para aliviar el dolor. Sin embargo, al ser una condición degenerativa, no tiene cura.
Enfermedades oculares
El funcionamiento adecuado de los ojos del husky siberiano puede verse afectado por la herencia de algunas limitaciones. Muchas de las enfermedades presentadas a continuación pueden causarle ceguera al animal si no son tratadas con urgencia.
- Cataratas: Es una opacidad en la lente del ojo que produce visión borrosa. La lente es un disco transparente y curvo ubicado en la zona frontal del globo ocular, justo detrás de la pupila. Es una condición fácil de detectar debido a que la opacidad en el ojo es evidente, al igual que su coloración gris. Aunque puede corregirse con cirugía, generalmente se presenta en perros de edad avanzada y mejora con el tratamiento.
- Distrofia corneal: Es una condición genética que consiste en la aparición de un edema progresivo en la córnea a causa de la distrofia y malformación de las células endoteliales. Aunque no afecta la visión de manera agresiva, requiere tratamiento de por vida y el perro puede necesitar cirugía.
- Glaucoma: Es un trastorno que consiste en el aumento de la presión intraocular, lo que afecta el nervio óptico y genera daños en la retina. Puede generar mucho dolor y conduce a la ceguera si no es tratada. Si notas que tu perro produce líquido ocular en exceso y su córnea está enrojecida, llévalo al veterinario de inmediato. El tratamiento suele mejorar la calidad de vida del perro.
Hipotiroidismo
Se produce por una deficiencia en la producción de la hormona tiroidea que afecta los procesos metabólicos del organismo del perro. El hipotiroidismo suele presentarse en canes de mediana a avanzada edad. Los síntomas incluyen:
- Pérdida de pelo, especialmente en la región del tronco y la cola. Usualmente, este síntoma no está acompañado de enrojecimiento cutáneo a menos que exista una infección.
- Resequedad y mal olor en la piel.
- Caída del pelaje externo.
- Oscurecimiento de la piel en zonas como la ingle y la axila.
- Infecciones del oído.
- Colesterol alto.
- Aumento de peso.
- Intolerancia al frío.
- Fatiga y cansancio recurrente.
A pesar de que el hipotiroidismo en perros no tiene cura, existe tratamiento de por vida que consiste en terapias de sustitución de la hormona tiroidea.
Enfermedades autoinmunes de la piel
Estos trastornos se presentan cuando el sistema inmunológico no tiene la capacidad de tolerarse a sí mismo, ocasionando que los anticuerpos, que normalmente protegen las estructuras de la piel, se activen en contra de ellas y causen daños. Aunque las enfermedades autoinmunes no son comunes en perros, el husky siberiano es propenso a sufrir las siguientes: síndrome uveodermatológico y pénfigo foliáceo
